Un día en la vida de nuestra piel

A diario mis pacientes me preguntan ¿por qué salió un brote? O ¿qué hace esta mancha ahí si no la tenía? Observaciones como: “Mi piel es rara, a veces está grasosa y de pronto la siento estirada y con líneas”.

Bien, primero que nada, déjame contarte que tu piel está viva, es el órgano más grande que tienes y efectivamente expresa todo lo que sucede en ti, en tu entorno y hasta tus emociones.

¿Cómo es el día a día para tu piel?

Al despertar, vas al espejo y tu piel se vé decaída, observas ojeras, hinchazón y poros dilatados, lavas con cualquier producto y sales corriendo a darte una “manita de gato”.

Inician tus labores cotidianas y con ello el estrés, te expones a la contaminación, aire acondicionado, sol y rayos UV, ¿sabías que la luz artificial emite rayos UVA?; la vida rápida va de la mano con la mala alimentación, falta de ejercicio y falta de sueño que, también afectan a tu piel.

Todo esto puede causar distintos daños a tu cutis, como la aparición de comedones (barros), acné, arrugas, manchas, deshidratación y además darte un aspecto envejecido, opaco y triste.

Cuando les explico esto, me dicen “Pues ni modo que no viva, que no salga o no trabaje”. Efectivamente debemos vivir nuestra vida cotidiana y de la mejor manera, es por esto que te dejo algunos efectivos tips para que tu piel esté saludable, restaurada y desintoxicada.

Por la mañana: 

1- Lava tu piel con una espuma o shampoo facial  (no con jabón para trastes ni de ropa)

2- Tonifica con una loción de acuerdo a tu tipo de piel, en este paso, aconsejo humedecer un algodón con dicho producto y lo deslices por tu piel para que retire las impurezas profundamente.

3- Aplica contorno de ojos, es muy importante ya que esa piel es mucho más delgada y por lo tanto más frágil.

4- Humecta, muchos piensan que por tener piel con tendencia a grasa, no deben aplicar este paso, lo cual es incorrecto, ya que una cosa es dar a la piel humedad, osea agua y otra es ponerle grasa, por eso existen geles, cremas ligeras y cremas pesadas, cada una es para cada tipo cutáneo.

5- Importantísimo, aplica pantalla solar (filtros solar), y retoca por lo menos otras dos veces a lo largo del día, yo la recomiendo cada 5 horas. Aunque no salgas a exposición directa con el sol, la pantalla solar te protegerá de los UVA que emite la luz artificial, las computadoras, televisión, celular, dispositivo móvil, etc.

A lo largo del día toma agua, agua y más agua, de 2 a 3 litros es lo más recomendable, el agua le dará turgencia, hidratación y juventud a tu piel.

Por las noches:

1- Lava tu piel 

2- Tonifica

3- Aplica tu contorno de ojos y

4- Humecta

5- Duerme, pero de verdad duerme, si te fijas, en la noche no aplicas pantalla solar, muchas personas hacen su rutina de belleza nocturna y después se quedan horas frente a la computadora o el dispositivo móvil, esto les provoca manchas en la piel, además de falta de sueño.

Una limpieza profunda de forma mensual y listo, con esto puedes llevar el mantenimiento de una piel sana.

P.D.T. Cada piel es diferente, por lo tanto no uses lo que le sirvió a la amiga de tu vecina, usa lo adecuado para tu tipo de piel, una buena cosmeatra puede ayudarte a elegir lo mejor para ti.

Se despide tu amiga,

Rebeca Becerra

CEO PIEL ES PIEL

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